
Investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV) han realizado un estudio pionero sobre el poder calorífico de los residuos de poda procedentes de diferentes especies de árboles urbanos como las moreras, plataneras, palmeras y acacias, y han determinado que su uso constituye una alternativa como fuente de energía. «El poder calorífico de la madera de estas especies se sitúa alrededor de los 17 Megajulios/kg de madera a una humedad del 10 por ciento, que equivale a 0.35 kilogramos de butano o 0.5 metros cúbicos de gas natural en condiciones de 1 atm y 15ºC».